El carácter del campeón

Hoy el fútbol ha sido justo. El Barça le ha ganado 2-3 al Valencia.
El veinte de marzo de 1993 estaba con dieciocho años y mis amigos viendo, en La Cabaña, un Valencia Barça. Lo recuerdo perfectamente porque fue uno de aquellos partidos que hacen afición donde los dos equipos luchamos hasta la extenuación y al final ganamos en el último minuto por 3-4.
Casi todo ha cambiado, ya no está La Cabaña, ya no tengo dieciocho años, Valencia es un pedazo de ciudad y los valencianos son divertidos, alegres, inteligentes y han conseguido que su ciudad pase a ser una de las más bonitas del mundo en los últimos veinte años, junto a Bilbao.
Pero cuando todos ellos entran en Mestalla, todos mutan. Es como la Invasión de los Ultracuerpos. Aquella peli en la que mientras duermes, las plantas crean tu doble raro. Un doble que no eres tú. Eres igual pero no eres tú.
Algunas cosas raras que pasan cuando los Invasores de los Ultracuerpos actúan:
Estábamos a punto de meter el segundo gol con un palo de Rakitic y a los cinco minutos nos meten dos. 
Sobre Munir. Todos sabíamos que marcaría Munir. Los que somos viejos, sabemos que al Barça le pasan estas cosas. Es el Donald Sutherland de la película. Qué tío más malo.
No es Brandelli es José Coronado. Nos está engañando. 
Enzo, Enzo… aplaude la afición cuando un jugador hace una entrada escalofriante a Neymar, después de haber lesionado a Iniesta. Acaba el partido saliendo mientras le cogen por los brazos y lo sacan en volandas. Un ejemplo maravilloso de deportividad y ejemplo para todos los críos. Luego dirán: «bueno, es un momento de calentón, lo que pasa en el campo se queda en el campo» y chorradas varias.
Umtiti que parece un Emperador. Digne que no se entera de que va el partido. 
Undiano no saca amarillas al Valencia en toda la primera media hora. Fenomenal.
Minuto 69 Mario Suárez ha sido amonestado. Teniendo en cuenta que debería hacer sido expulsado en el minuto 8, no está del todo mal. Una vergüenza. Pero esa vergüenza se multiplica por el logaritmo neperiano de infinito cuando le saca amarilla a Messi. No hay dignidad, no hay respeto.
Parejo se pasa la mitad del partido quejándose, con lo bueno que es y se pasa más tiempo con cara de pena y hablando con el árbitro que metiendo goles.
Abdennour, decirle que la potencia sin control no sirve de nada. 
A ver si el Valencia juega igual contra el Madrid. Ya veremos. Me encantaría.
Habéis enfadado a Messi y ha metido dos goles y el último del penalty más claro de la historia. Qué feo lo de Diego Alves. Qué feo.
Y uno, digo solo uno, ha tirado una botella a ver si podía hacer daño. Los valencianos no son así, pero ¿por qué no se cierra el campo durante un mes? veréis como nadie más tirará nada en ningún campo. 
Menos mal que el Valencia FC ha enviado un tweet deseando que Iniesta se mejore. No podía ser todo tan raro.
Y otros tres puntos más y la vida sigue igual. Messi dejando recuerdos y ganando opciones para ser claro Balón de Oro. No hay competencias que valga, ni la del que le mete mil goles a Andorra.
Artículo publicado para el Diario AS.